Abrimos la última semana de febrero con un interesantísimo reportaje acerca de los trabajos que se están llevando a cabo desde diferentes planos técnicos en pro de acertar con las medidas que deben permitir a las PYMES sobrevivir en un escenario imprevisible en el cual los efectos negativos de la pandemia siguen acompañando nuestras vidas más de lo que se pensaba al iniciar el verano del pasado año. Las medidas horizontales con las que cuenta el sector empresarial deben continuar en el tiempo, lamentablemente durante todo este año, pero no son por si solas suficientes para una hibernación total de empresas proveedoras de servicios a la sociedad como las nuestras, a las que a cada trimestre ven cómo el reinicio paulatino de actividad queda frenado ante un plan paralizado de vacunación. Sin inmunidad de rebaño doméstica, comunitaria y mundial, los avances serán escasos y será cada vez más difícil continuar sin actividad y sin ingresos.
Moncloa fía más la recuperación a ayudas fiscales que a inyecciones directas – elEconomista.es