Tal y como se ha anunciado en estos días, ayer se presentó el certificado COVID, mecanismo que permite los desplazamientos en cualquiera de las modalidades de turismo entre países comunitarios, previo al inicio de la próxima temporada estival que ojalá sea mejor que la del año pasado. Con esta herramienta no se pretende coartar las libertades de los ciudadanos, pero en tiempos de pandemia se deben extremar las precauciones epidemiológicas por un lado, pero también permitir el desarrollo económico y de servicios de un sector que aporta al menos en España un 12% de su PIB anual. El Gobierno de España lo ha apoyado desde el principio, y esperemos tenerle con nosotros cuanto antes y todo el tiempo de vigencia que sea necesario con ese objetivo a la vista de lograr en cada Estado miembro la llamada “inmunidad de rebaño”.