La campaña contractual de verano en numerosos sectores económicos va a aligerar el número de profesionales acogidos a ERTE, y ya se está observando, según marcan las cifras: 638.283 a finales de abril, 542.142 de cierre de mayo, y los 200.000 que se esperan a mitad de verano. Si recordamos, a inicio de la activación de dicha medida eran 3,6 millones de trabajadores los acogidos a la misma, lo que hace un fiel reflejo de la progresiva recuperación económica y general a nivel global. No obstante, hay subsectores que no recuperaremos en el verano, y que si notaremos un impulsito en septiembre con los arranques feriales y del transporte escolar (ojalá ya con extraescolares y actividades deportivas), y en octubre con el Programa IMSERSO. Pero ello no significará el fin de nuestra crisis, y deberemos continuar cubriéndonos con la medida de los ERTES. El regulador no conoce nuestro sector, por ello si queremos que sigamos protegidos hasta comienzos de la Semana Santa 2022 es básico estar ahí y ser lobby para llevar la realidad de nuestras tesorerías, presupuestos y productividad para justificar la continuación de los ERTES