Con motivo del cierre de 2023, la Organización Internacional del Transporte por Carretera (IRU, International Road Transport Union) ha recordado que la escasez de conductores profesionales es uno de los principales problemas del sector del transporte de viajeros por carretera. Cifra en más de 105.000 las vacantes existentes en el sector, el 10% de la población total de conductores profesionales.
Según explica IRU, el auge del transporte de viajeros por carretera tras la pandemia del COVID ha aumentado la demanda de conductores y más del 80% de las empresas que operan en el sector se enfrentan a dificultades graves, o muy graves, para cubrir puestos de trabajo. Una situación que se prevé siga empeorando, duplicándose la falta de profesionales para 2028.
Por otro lado, IRU destaca el déficit de mujeres existente en el transporte de viajeros. Sólo el 16% de los conductores de autobuses y autocares son mujeres, cifra por debajo de la media de la industria del transporte (22%) y de la población activa (46%). La profesión, por añadidura, se caracteriza por unas plantillas que envejecen. Apenas el 3% de los conductores de autobuses y autocares en Europa tienen menos de 25 años, mientras que más del 40% tienen más de 55 años.
Por otro lado, más de 330.000 conductores de autobuses y autocares se jubilarán en los próximos cinco a diez años, mientras que la tasa de recién llegados es significativamente menor. Sin medidas para atraer y retener a los conductores, Europa podría tener más de 275.000 puestos vacantes para conductores de autobuses y autocares de aquí a 2028.
En este contexto, la Asociación Nacional de Empresarios de Transportes en Autocares (ANETRA) reafirma su compromiso con la generación de las condiciones necesarias para mejorar el atractivo de la profesión de conducir autocares, y recuerda las iniciativas llevadas a cabo este año como el programa “Empleo sobre ruedas” para la capacitación de colectivos vulnerables como conductores profesionales o la asistencia a ferias para la captación del talento más joven.