Europa se enfrenta a una grave escasez de conductores de autobuses, autocares y camiones que se prevé más que duplicar en los próximos años. Ambos sectores tienen una población de conductores que envejece. Menos del 3% de los conductores de autobuses y autocares son menores de 25 años, mientras que más del 40 % tienen más de 55 años. Del mismo modo, menos del 5 % de los conductores de camiones tienen menos de 25 años y un tercio tiene más de 55 años. Son los datos con los que IRU, Organización Internacional el Transporte por Carretera (IRU), entidad de la que forma parte la Asociación Nacional de Empresarios de Transportes en Autocares (ANETRA), vuelve a llamar la atención de este problema y anuncia la puesta en marcha de una nueva iniciativa llamada Movilidad de Conductores Cualificados para Europa (SDM4EU) en colaboración con el Centro Internacional para el Desarrollo de Políticas Migratorias y el Servicio de Asociación para la Migración.
Reconociendo la gravedad de la escasez, los miembros del IRU han pedido a los gobiernos que se centren en políticas de inmigración personalizadas a través de la posición común adoptada el año pasado: “La escasez de conductores también necesita inmigración legal”.
En este contexto ve la luz el nuevo proyecto de Movilidad de Conductores Cualificados para Europa que tiene como objetivo mapear de forma exhaustiva los países de origen y destino de los conductores profesionales. También desarrollará un marco de empleo de conductores cualificados y apoyará la movilidad de los conductores de los países con un superávit a los que se enfrentan a una escasez.
SDM4EU reúne a una amplia gama de partes interesadas, incluidas empresas de transporte, conductores profesionales, expertos en contratación, asociaciones, sindicatos, autoridades, institutos de formación y centros de evaluación.
El director de Certificación y Normas de la IRU, Patrick Philipp, destacó la necesidad apremiante de abordar la escasez crónica de conductores a través de la cooperación global en el evento conjunto de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el Centro Internacional para el Desarrollo de Políticas Migratorias (ICMPD), titulado “Future-Proofing Labour Markets: The Role of Skills Mobility Partnerships”, que tuvo lugar el pasado19 de junio en París.
“Ningún actor de la industria puede resolver la escasez de conductores por su cuenta. Requiere colaboración entre todas las partes interesadas de la industria. Pero la cooperación dentro de un solo país o región no siempre es suficiente”.
Patrick Philipp hizo hincapié en que en muchos países desarrollados con una población que envejece, contratar a suficientes conductores locales simplemente no es factible.
Advirtió que esta escasez afecta a mucho más que a las operaciones comerciales. También pone en peligro la seguridad, la transición a la movilidad colectiva, la calidad del servicio y la resiliencia de la cadena de suministro.
Al mismo tiempo, Patrick Philipp destacó que algunos países tienen un exceso de talento de conductores profesionales que podrían ayudar a llenar las lagunas en otros lugares a través de “asociaciones de movilidad de habilidades”.
Las pequeñas y medianas empresas, la columna vertebral de la industria, en particular necesitan apoyo para facilitar el acceso a los conductores de los países excedentes a través de tales asociaciones.
El proyecto SDM4EU, cofinanciado por la Unión Europea, tiene como objetivo precisamente ser una parte vital de la solución a la crisis de escasez de conductores a la que se enfrenta la industria del transporte por carretera.