El Comité de Transportes por Carretera de la Unión Europea, a instancias de la Unión Internacional del Transporte por Carretera (IRU), organización de la que forma parte la Asociación Nacional de Empresarios de Transportes en Autocares (ANETRA), ha arrancado a los Estados miembros el compromiso de no sancionar hasta el 28 de febrero el incumplimiento de la obligación de montar un tacógrafo inteligente de segunda generación en el transporte internacional. Este “periodo de gracia” o “de concienciación”, que de ambas formas lo ha definido Bruselas, no significa que la norma que obliga a la sustitución de los tacógrafos analógicos y digitales por el tacógrafo inteligente de segunda generación no entre en vigor el próximo 31 de diciembre tal y como estaba previsto. Simplemente, no se sancionará hasta finales de febrero.
Tras la voz de alarma dada por la IRU, basada en la clara evidencia de que un número significativo de operadores de transporte no estaría preparado para continuar con las operaciones transfronterizas a partir del 1 de enero debido a los retrasos en la adaptación al tacógrafo inteligentes de segunda generación, la Comisión Europea recomendó a los Estados miembros de la Unión Europea aplicar un “período de gracia” de dos meses, del 1 de enero de 2025 al 28 de febrero de 2025. Durante este período, los operadores de transporte que aún no hayan adaptado sus vehículos no se enfrentarán a sanciones. En cambio, las autoridades harán esfuerzos para aumentar aún más su conciencia del requisito de modernización.
Esta medida tiene como objetivo ayudar a los operadores y fabricantes a abordar el retraso en la adopción de los nuevos tacógrafos y minimizar la interrupción del transporte transfronterizo y las cadenas de suministro de la Unión Europea.
Según explican fuentes de IRU, con esta medida se consiguen varios objetivos:
- Continuidad operativa del servicio: Garantiza que los vehículos puedan continuar con las operaciones transfronterizas durante el período de gracia, evitando interrupciones en las cadenas de suministro de la UE.
- Apoyo al cumplimiento: Proporciona a los operadores de transporte tiempo adicional para adaptar los vehículos mientras mantienen el acceso a los mercados clave.
- Colaboración industrial: Fortalece la cooperación entre operadores, talleres y responsables políticos para cumplir con los requisitos legislativos de manera eficiente.